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martes, 3 de agosto de 2010

El Metabolismo 2. (Metabolismo Basal)

Como ya mencioné antes en el primer post sobre metabolismo, éste se encarga de producir a partir de los alimentos que ingerimos, la energía necesaria para:


1) realizar nuestra actividad física y mental diaria.



2) mantener vivos nuestros órganos y tejidos, esto se llama metabolismo basal que también incluye la generación del calor necesario para subsistir ya que somos animales de sangre caliente.

Existen muchas fórmulas y tablas para calcular cuánta energía nos hace falta al día. La mayoría incluyen variables como edad, género o actividad física.





Por cierto que esa energía que diariamente nos hace falta se da siempre en Kilojulios o mejor en Kilocalorías a pesar de que coloquialmente se habla de calorías. Eso puede llevar a error. Yo ya he visto algunas chorradas en internet sobre si una caña de cerveza tiene la energía que gastamos en un día y algunas otas "joyas".

KCAL

Cuando leemos que un hombre adulto necesita de 2000 a 2500 Kcal al día, tenemos que tener en cuenta que en la mayoría de los casos, se trata de estimaciones medias para personas de actividad física entre baja y moderada.

Claro, que llegado a este punto tendremos que saber qué se entiende por actividad física moderada, baja o alta. Y es que estas necesidades se calculan para el mundo actual, dónde la mayoría de los trabajos físicos han desaparecido, dónde se utiliza el coche para ir a comprar el pan a la vuelta de la esquina y donde el deporte entendido como ocio, está cada vez más en desuso. Hace 50 años, probablemente esas necesidades calóricas eran un 20% mayores.


Si desglosamos ahora el cálculo de esas necesidades diarias de energía:

Un hombre puede necesitar en torno a 1700 Kcal para su metabolismo basal. La mujer un 10-15% menos. El resto de las necesidades se irán en nuestra actividad física o mental. Si consideramos la actividad mental constante, en teoría sólo nos quedaría el ejercicio físico para gastar más o menos calorías.


Afortunadamente, esto no es del todo cierto. Podemos aumentar nuestro gasto energético aumentando el metabolismo basal. Recordemos que el metabolismo basal incluía:

1) Generación de calor.

2) Energía para mantener vivo nuestro organismo.


La primera variable es difícil de modificar. Aunque haga más frío nos abrigamos más, el cuerpo no va a producir más calor. El calor generado, lo define la genética y en cada persona va a ser diferente. Existen personas que producen mucho calor y por lo tanto la cantidad de gasto energético dedicada a producir calor es grande. Si, es cierto que existen productos termogénicos, es decir, que hacen que produzcamos más calor, por ejemplo, la cafeína, los picantes, pero ese efecto, es de duración muy corta y además son sustancias que producen acostumbramiento. Nuestro organismo se habitúa y cada vez haría falta una cantidad mayor para producir el mismo efecto.






Pero podemos ganar la batalla a la genética en la segunda variable. Los músculos necesitan mucha energía, simplemente para mantenerse, sin tener en cuenta que los usemos o no. Sin embargo la grasa no necesita ni una kilocaloría de gasto energético para permanecer almacenada en nuestros michelines.

Por lo tanto, sólo tendremos que aumentar nuestra masa muscular (con esteroides no, por dios, que eso sólo aumenta el almacenamiento de agua) y entonces la parte de la tasa metabólica basal destinada a mantenernos vivos, aumentará también y por lo tanto aumentará nuestro gasto energético diario.


Por desgracia, no conozco ninguna forma de aumentar la masa muscular que no pase por hacer ejercicio. A su vez, el ejercicio físico va a acelerar el metabolismo y aumentar nuestras necesidades energéticas diarias, como ya hemos visto antes.


Así pues, adelgazar sin incluir algún tipo de ejercicio físico, no es una buena idea.

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